El Ministerio de Sanidad, Política Social e Igualdad de Leire Pajín ha decidido patrocinar 'Gran Hermano 12' y subvencionar la zafiedad y los insultos que una vez más los concursantes profirieron en el 'prime time' de Telecinco durante la gala de expulsiones de este jueves. La austeridad, tantas veces pregonada como necesaria por Pajín, brilló por su ausencia el jueves. Ahora el Gobierno hace de 'mecenas' de la telebasura.
“Con responsabilidad ganamos en salud”, fue el mensaje que el Ministerio de Sanidad exhibió durante la emisión de 'Gran Hermano 12'. Concretamente, el anuncio apareció antes de retomar la conexión de 'Gran Hermano 12' tras un corte publicitario y en forma de cortinilla donde el 'spot' y la voz en off señalaban con un rótulo que 'Gran Hermano' estaba patrocinado por Sanidad.
'Gran Hermano' ha promocionado algunas otras campañas como la que invitaba a 'Sacar tarjeta roja al maltratador' o la cruzada antitabaco a través de la figura de Mercedes Milá, la presentadora por antonomasia del espacio.
A pesar de que el programa está dirigido al público juvenil, la campaña que ayer patrocinó el 'reality show' está dirigida especialmente a la gente mayor, principales usuarios del sistema sanitario español, que incide en la importancia de utilizar los servicios de la Seguridad Social sólo cuando sea necesario, para fomentar el ahorro en tiempos de vacas flacas. De hecho, Pajín ha propuesto que se pague una cantidad simbólica, de diez a 15 euros, por las consultas médicas con el fin de garantizar la sanidad pública. Consultado por este diario, el Ministerio de Sanidad no ha respondido todavía cuánto han costado esas campañas gubernamentales.
“Estoy quedando como el gilipollas de España”, decía uno de los concursantes. Pero siguieron más lindezas: “Rubén va detrás del culo de la otra”, “mola, pero estoy cagado, estoy cagadito”, “la más sucia, la más perra es ella”, “que les den por el culo”, “cojo un ladrillo y se lo estampo”... 'Gran Hermano 12', como es habitual, organizó un espectáculo basado en el interés que suscitan los personajes de la casa de Guadalix, salteado de improperios y bajas pasiones.
Me llamó muchísimo la atención este patrocinio.
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