¿Por qué no esta justificada la ley Sinde?

Si bien es cierto que la mayoría de los menores de 25 años se descargan archivos digitales, también lo es que esta actividad online no les impide acudir con asiduidad a los cines o ver en sus casas películas en DVD.
 
De las últimas cifras publicadas, se desprende que bajarse películas, música u otros archivos en internet no resta tiempo libre para que los jóvenes acudan, por ejemplo, habitualmente a las salas de exhibición de cine.

El ocio del denominado “gratis total” en internet convive con el pago de entradas en el mundo real, según se interpreta del Barómetro de Hábitos de Lectura y Compra de Libros de 2010, de la Federación General de Editores de España.

Este informe no sólo analiza la tendencia sobre el mundo del libro, sino que, además, avanza cifras sobre qué actividades culturales realizan en su tiempo libre la población española: desde el cine al teatro pasando por el uso de internet.

Si tomamos dichos datos, comprobamos que el 92,9% de los jóvenes entre 14 y 25 años se conecta y usa internet de manera frecuente. De esta gran mayoría, el 66,1% de las personas de menos de 25 años confiesa que se descarga archivos cada día o a bien de manera semanal.

Lo curioso es que estos datos de hábitos de descarga digitales no es una práctica que reste afluencia, por ejemplo, a las salas de cine.

Si seis de cada 10 personas de este colectivo se baja archivos por internet, también es cierto que los jóvenes españoles de menos de 25 años complementan esta actividad con ir a ver una película en las salas de cine de su localidad.

Así, el 73,2% de los jóvenes afirma que ha frecuentado los cines en los últimos tres meses y, además, existe otra cifra significativa en dicho informe: el 84,1% de la población juvenil también declara que “ve películas en deuvedé”.

“En la encuesta realizada, hemos preguntado por estos hábitos de consumo. Así, las respuestas que afirman que han ido al cine o visto un DVD en los últimos tres meses, solamente nos indican la intensidad de ese hábito, pero no la frecuencia”, detalla Juana Vidal, directora de estudios de Conecta Research & Consulting, empresa que realizó el baremos anual para los editores españoles.

Así, la mayoría de los jóvenes confiesa que en los últimos tres meses han acudido al cine, pero dicho baremo estadístico no cuantifica o detalla cuántas veces han pagado por una entrada en el trimestre que se ubica el estudio.

Son cifras, por tanto, que, hay que analizar bajo el condicionante de la estadística. Sin embargo, sí demuestran que las descargas digitales no impiden consumir cine en salas de exhibición.

En definitiva, dicho baremo nos dice que, parcialmente, no existiría de manera imperiosa y como único argumento para el sector cultural la necesidad de implantar una nueva normativa –la ley Sinde-. La industria debería tomar nota de dichos hábitos para buscar en ellos oferta, demanda, nuevas inversiones y fuentes de ingresos. 

Si no, veamos otro dato para el análisis. Existe más jóvenes españoles que dedican su tiempo libre a estar enganchados en las redes sociales que a la ejecución de la descarga de archivos.

El 85,7% de los menores de 25 años declara que visita las redes sociales y el 79,5% que visiona vídeos de Youtube diaria o semanalmente, un consumo digital que no evita que pasen también parte de su tiempo libre, como hemos mencionado, frecuentando el cine (73,2%), o bien  escuchando música (98,6%), haciendo deporte (73%) o, en menor medida a yendo a conciertos (32,6%), como costumbre de ocio y actividad que han tenido en los tres últimos meses.   

Publicar un comentario

Artículo Anterior Artículo Siguiente