La educación y la aventura

"Los jóvenes españoles emigran por su espíritu aventurero y no por la crisis". Estas palabras las usó ayer la secretaria general de Inmigración y Emigración, Marina del Corral. 

Partiendo de la base de que generalizar está muy mal, creo que es de lógica común que en situaciones de crisis económica, la población emigre, y más si a esto le sumamos que tenemos la juventud española mejor formada de todos los tiempos y que desea demostrar su valía en un país en el que se le cierran puertas. En fin, luego nos quejaremos de la fuga de cerebros.

Pues bien, resulta que los jóvenes españoles no simplemente emigran por la crisis, sino que también lo están haciendo porque sienten vergüenza de su país, que nadie se escandalice por eso, y además os aseguro que esto os lo escribe un positivo y férreo defensor de su patria. El titular es que "Más de 300.000 jóvenes españoles se han ido de España desde 2008", y dudo mucho señora Marina del Corral, que ese número tan elevado sea de jóvenes "aventureros", en un país en el que padres y madres optan siempre por una protección desmedida de sus hijos y que por tanto nunca tuvieron una educación fomentada en la aventura.

Señores y señoras es indignante sentir como se premia al "inepto" y no a aquellos que hacen de su juventud un estudio continuo para mejorar su futuro e incluso el del propio país. Un ejemplo claro de ello es el siguiente: "En Extremadura darán 1000 euros a todos aquellos que abandonaron la ESO y decidan volver a ella", y a la semana siguiente encuentras este otro titular: "Extremadura anula el plan de refuerzo para estudiantes con dificultades".

Creo que sobran los comentarios al respecto. Simplemente pido públicamente a los políticos, que si hay dinero para premiar el abandono escolar, también lo hay para aquellos que cumplen con sus obligaciones educativas, si no, ustedes se están saltando las leyes de equidad por la torera. Nunca mejor dicho, porque están toreando a los jóvenes españoles como quieren. Pero no se engañen, los jóvenes preparados, saldremos por la puerta grande.

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